El derviche
El derviche
A un derviche que se consumía en el fuego de la pobreza y que ponía remiendos a los remiendos de su ropa, le oí decir para consolarse:
Conformémonos con una hogaza y un ropaje recosido, que soportar la desgracia es mejor que estar agradecido.
Alguien le dijo: « ¿Por qué estás ahí sentado si fulano de tal, que vive en esta ciudad, es generoso con todos y está dispuesto a servir a los que se han liberado del mundo y a reconfortar todos los corazones? Si conociera el estado en que te encuentras te atendería para dignificar el recuerdo de las buenas personas». Respondió: «Cállate, que es mejor morir indigente que pedir a la gente».
Es mejor remendar parches y resignarse que pedir a los señores y rebajarse. Ciertamente el tormento infernal e ir al cielo mediando el vecino, es igual.
Golestán (La rosaleda), Sa’dí, Editorial Cobre