Poema
Poema
El día inicial emergió en epifanía la luz de tu belleza.
Se reveló el amor y prendió fuego al mundo entero.
Con esa llama quiso el intelecto encender una lámpara
El destello de los celos se inflamó y confundió al universo.
El ateísmo es el camino para basarse en la abstinencia y en la ciencia,
el que sigue la vía la fe precisa aunque tenga cien técnicas.
Aunque mil enemigos intenten matarme,
si tú eres mi amigo, yo no he de asustarme.
Mucho hace que el amado no manda mensaje alguno
no envió ningún saludo ni una palabra escribió.
Albricias, corazón, quien llega respira en Jesús
con sus gozosos alientos el olor de Aquel nos llega.
Oh rey de los santos, la tristeza de la soledad me hace gritar.
Sin ti agoniza mi corazón, hora es de que regrese.
De dolor de alejamiento no te lamentes ni grites, que anoche consulté con el augur y un salvador es
quien llega.
José, perdido, volverá a Canán, no te aflijas.
El nido de las penas será jardín un día, no te aflijas.
Fuente: “101 poemas de Hafez Shirazi”, Mohamad Hafez Shirazi, Traducción Clara Janes, Editorial Monte Avila, Caracas
Fundación Cultural Oriente