Aire, aire
Aire, aire
Autor: Hafez
¿Se apacigua mi corazón si estás distante? ¡No hay tal!
¡Aire, aire!, si el vientono me trae tu olor,
instante a instante desgarro mi camisa como la flor.
¡Mejor la herida que tú me causas que el ungüento de otro!
¡Mejor tu veneno que de otro el antídoto!
Por el filo de tu espada será eterna nuestra vida.
Que se alegra nuestro espíritu, si por ti se sacrifica.
Y si me hieres con la espada, nogires las riendas del caballo,
que será escudo mi cabeza, y de la silla no apartaré la mano.
De tu ser tú, ve lo que ve cada mirada.
Y del saber, cada uno a su medida capta.
A ojos del pueblo, Hafez será amado sin par,
cuando corone su cabeza con el polvo de tu umbral.
Fuente: “101 poemas de Hafez Shirazi”, Mohamad Hafez Shirazi, Traducción Clara Janes, Editorial Monte Avila, Caracas
Fundación Cultural Oriente