Retrospección
Cuando era un niño
La tierra era la misma
y el cielo, éste mismo.
pero, ¡qué sorpresa! estaba lleno de mariposas
Y el vidrio de cada ventana
tuvo un sol y una sonrisa.
El aire del arriate
fue el mejor desayuno. ...
Cuando era un niño
La tierra era la misma
y el cielo, éste mismo.
pero, ¡qué sorpresa! estaba lleno de mariposas
Y el vidrio de cada ventana
tuvo un sol y una sonrisa.
El aire del arriate
fue el mejor desayuno. ...
Esta casa está vacía,
excepto de mí.
Es una casa
totalmente vacía.
Cuando Alejandro moría en su expedición en favor de la religión, Aristóteles le dijo: — ¡Oh monarca de la fe! durante toda tu vida no has cesado de dar instrucciones imperiosas; pero hoy, tú mismo eres una advertencia para el mundo". ¡Oh corazón mío!, recibe esta advertencia en medio de este torbellino de desgracia. Permanece atento y vigilante, pues la muerte te persigue. Te he hecho oír el lenguaje de los pájaros y todos sus discursos. A ti te toca comprender, ¡oh ignorante! Los pájaros están en el número de los amantes cuando se vuelan de su jaula antes de la muerte. ...
A corta distancia
Tengo miedo
hoy que vos no estás
ya no puedo
seguir
viviendo así...
Antes de Othman hubo un escriba que solía ser diligente al transcribir la revelación. Cuando el Profeta se la dictaba, él la escribía en la hoja. Los rayos de la revelación brillaban sobre él, que encontraba sabiduría en su interior. El Profeta dictaba la sustancia de la sabiduría: por esta pequeña porción ese necio entrometido se descarrió, pensando: «Tengo en mi conciencia la verdad de lo que está diciendo el iluminado Profeta».
Pasajeros entre palabras fugaces:
Cargad con vuestros nombres y marchaos,
Quitad vuestras horas de nuestro tiempo y marchaos,
Tomad lo que queráis del azul del mar
Y de la arena del recuerdo,
Tomad todas las fotos que queráis para saber
Lo que nunca sabréis:
Cómo las piedras de nuestra tierra
Construyen el techo del cielo.
Yo no vivo en ningún sitio:
mi dirección es lo inesperado.
Navego como el pez salvaje por esta extensión,
en mi sangre hay fuego y en mis ojos chispas.
Voy en busca de la libertad del viento
que dominan todos los gitanos.
Corro tras una nube verde,...
Un día Adán miró con desprecio a Iblis el condenado. Se comportó con arrogancia y soberbia: se rio de la situación del maldito Iblis. Los celos de Dios clamaron: «Oh elegido, eres ignorante de los misterios ocultos. Si Él le diera la vuelta a Su abrigo, arrancaría de cuajo hasta la más firme montaña; en ese instante haría que cien adanes se avergonzaran y sacaría cien diablos recién convertidos al Islam».
El sentido de la vista se transforma en visión
Después de encontrar al Amigo.
Otra vista se eleva más allá de los ojos
Y mira a través de los ojos
Esto no puede sucederle a un tonto.
Un tonto mira a un veneno mortal
Y ve un caramelo por un momento
Todas las vías están abiertas
frente a mí, todos los acertijos, resueltos
de antemano: un golpe en la puerta que se abre...
La noche para el día, esposa.
Y así,
me sumerjo en río de sangre, sin hallar la puerta,
sin entrar de noche a la ciudad,
en un festival de ladridos de perros...