La noria
Gime con tal tristeza
Que cautiva a las almas.
Al verla entre los arriates
La tierra seca dice: No me toques...
Gime con tal tristeza
Que cautiva a las almas.
Al verla entre los arriates
La tierra seca dice: No me toques...
Muhammad dijo: “El cuenco calló del techo,
Y comprendí esta existencia corporal
Veo a una uva inmadura
Y puedo saborear el vino.
Veo tu prosperidad y tu caída.
Te veo bebiendo el veneno
Que causará tu muerte.
Cuando su voz estalló
-como explotan
los globos revolucionarios
en las fiestas de cumpleaños
de la injusticia-
un reino se descompuso
en sus factores primos
y el imperialismo gimió
en el regazo de la erupción
de un volcán apagado.
Un hombre de ideas elevadas y con los ojos fijos en la vía espiritual no aceptaba de beber nunca de la mano de nadie...
Puedes tener muchas devociones a tu crédito,
Mucho ayuno y oración,
Pero no has probado el sabor de esos actos
Hay muchas conchas de nuez,
Pero ninguna con un dulce fruto dentro.
Tiene que haber un regusto,
Una semilla deliciosa, o el fruto
No podrá producir una planta,
Que luego se vuelva un árbol productivo.
Las prácticas de austeridad sin sabor,
Son sólo fantasías...
Estoy feliz incluso antes de tener una razón para estarlo.
Estoy lleno de Luz incluso antes de que el cielo
Salude al sol o a la luna.
Queridos compañeros,
Hemos estado enamorados de Dios
Desde hace tanto, tanto tiempo.
Entonces, ¡¿ qué otra opción le queda a Hafiz
Que Bailar por siempre?!...
No hay más Realidad que Dios,
Dice el sheik completamente sometido,
El cual es un océano para todos los seres.
Los niveles de creación son como briznas de paja en el océano.
El movimiento de las briznas proviene de la agitación de las aguas.
Cuando el océano desea que las briznas se calmen,
Las envía cerca de la costa.
Cuando las desea en las aguas profundas, hace con
Ellas lo que el viento hace con el césped.
Esto nunca termina...
¿Qué hace la pureza?
Corta las riendas del arado.
Te libera de tener que trabajar y comer
En el lodo.
Te libera de tener que vivir detrás
De un gran buey
Que rompe constantemente el viento.
¿Qué puede hacer la pureza, querido
mío?...
El schaikh Abú Bekr de Nischapur salió de su convento a la cabeza de sus discípulos. El schaikh iba sobre su asno y sus compañeros le seguían por el camino. De repente el asno dejó oír un ruido inconveniente; el schaikh se dio cuenta enseguida, lanzó un grito y desgarró sus vestiduras. Sus discípulos y todos los que percibieron la acción del schaikh no la aprobaron. Uno de ellos acabó por preguntarle por qué había actuado así. El respondió: "Echando una ojeada por todos lados veía el camino ocupado por mis compañeros. Tenía discípulos delante y detrás de mí y me dije entonces: 'En realidad yo no soy menos que Bayazid. Así como hoy estoy agradablemente acompañado por diligentes discípulos, sin duda así entraré mañana orgullosamente con la alegría de la gloria y del honor en la llanura de la resurrección'. Cuando hube presumido así de mi destino fue cuando el asno cometió la incongruencia de la que habéis sido testigos y por la cual ha querido decir: 'He aquí larespuesta que da un asno a semejante pretensión y a un pensamiento tan vano'. El fuego del arrepentimiento ha caído entonces sobre mi alma, han cambiado mis ideas y se ha derrumbado mi imaginaria posición"...
Más allá de las montañas hay una ciudad,
donde todas las ventanas se abren a la luz,
donde los tejados hospedan a las palomas que observan la fuente de la inteligencia humana.
Más allá de los mares hay una ciudad donde el sol brilla extensamente como los ojos de los madrugadores.